Infantil abrió una ventana al otoño y los más pequeños han descubierto muchas cosas nuevas. Han observado que las hojas de los árboles cambian de color y ahora se tiñen de marrón, rojo, naranja y amarillo. Durante la experiencia en clase, las profesoras han explicado cómo, con la llegada del viento, “los árboles pierden sus hojas y nos dejan entrever una luz diferente. Durante todos estos días también han aprendido cuáles son los frutos propios de esta estación (piñas, calabazas, granadas, castañas, nueces, bellotas e incluso madroños).

“Iniciamos nuestra aventura otoñal disfrazándonos de árbol por un día, recitando poesías y cantando canciones”, cuenta Cristina, una de las profesoras de 2º de Infantil, curso en el que se hizo la experiencia. Después de las explicaciones –señala Mª Ángeles, otra profesora de 2º- “los niños hicieron una incursión por el bosque del colegio para recolectar distintos frutos y hojas del otoño. Se lo pasamos muy bien”. Al terminar, todos juntos, los clasificaron y elaboraron unas cestas y un mural de otoño.

Además, en el taller de reciclaje, han construido unas setas con cartón y los alumnos compartieron sus nuevos conocimientos con sus abuelos en el Día del Abuelo celebrado en Infantil recientemente.