- Anthony Lizonde es otro de los alumnos premiados este año.
- Cuatro alumnos del colegio participaron en la Olimpiada Científica para 4º ESO.
- La entrega de premios es el 25 de marzo en el IES Joaquín Turina.
Antes la ausencia de una olimpiada de Química para estudiantes de Secundaria y el deseo de promover esta materia en el curriculum escolar, la Real Sociedad Española de Química decidió organizar este año la Olimpiada Científica para alumnos de 4º de Secundaria. El IES Joaquín Turina se encargó de ello. La Olimpiada se celebró el 17 de febrero y la entrega de premios el 25 de marzo.
Tajamar presentó a cuatro alumnos y uno de ellos, Anthony Lizonde Vargas, ha quedado 10º en la clasificación. La entrega de premios a los quince primeros clasificados es el 24 de marzo en la sede el IES Joaquín Turina. Anthony es otro alumno del colegio que ha recibido distinción este año.
Olimpiada para descubrir futuros científicos
Estos certámenes científicos son muy atractivos para estudiantes con interés por la biología, la química, la física, la geología o las matemáticas y a los que les atrae razonar y realizar experimentos. En este sentido, los alumnos de Secundaria del colegio aprenden a desarrollar el método científico en las prácticas de laboratorio que realizan periódicamente.
Además de Anthony, también participaron Adrián Valea Pardo, Jorge García-Uceda (4º C) y Pablo Ruiz Sánchez (4º E). En la olimpiada han competido 130 alumnos de 24 centros.
La prueba a la que se enfrentaron los alumnos consistía en la resolución de problemas de física, química, matemáticas y biología. En concreto, tuvieron que responder a 18 preguntas tipo test y 2 cuestiones de desarrollo.
En cada cuestión de tipo test se ofrecían cinco posibles soluciones de las que sólo una era la correcta. La solución de los problemas debía desarrollarse convenientemente. Tanto las cuestiones como los problemas se referían a contenidos científicos, fundamentalmente de matemáticas, física y química, pero también de biología, geología y tecnología.
Preguntado sobre cómo afrontó los problemas, Anthony contesta que “cada uno podía hacerlo como mejor supiera. Yo desarrollé mi propio método, que combina la aplicación de fórmulas y lo que todos llaman la cuenta de la vieja, pero sin dejar de hacer comprobaciones en cada paso que daba”.
Durante la preparación de la Olimpiada Científica, estos cuatro alumnos contaron con la ayuda de otro alumno de Bachillerato, Iván Correas (2ºA), que ya tenía experiencia, pues había participado en una Olimpiada de Química.
Anthony estudia en Tajamar desde 1º de Primaria y, ahora que está a las puertas de Bachillerato, dice que “me gustaría estudiar Arquitectura o Ingeniería Aeronáutica”. Desde luego, empieza con buen pie.