Durante dos semanas de noviembre todos los alumnos de la ESO van a visitar las instalaciones del comedor. En este caso no serán meros comensales sino visitantes a los que se les va a explicar todo el proceso de trabajo, desde que se recibe el alimento por parte del proveedor hasta que se sirve en las bandejas.
Raquel Núñez, coordinadora y directora del comedor, considera que “esta iniciativa va a permitir que los alumnos entiendan en qué consiste el trabajo del personal de cocina y valoren más todo lo que conlleva que la comida se sirva a la hora programada y a más de mil comensales cada día”.
Cada curso de la ESO pasará por las instalaciones. La clase se divide en cuatro grupos y cada grupo va pasando alternativamente por cada parte del proceso de elaboración de comidas: gestión, refrigeración y almacenamiento, preparación y emplatado.
Durante la explicación los alumnos han podido entender que a partir de la fase de recepción de los productos existe un proceso de almacenamiento ambiente, refrigeración, congelación y descongelación de los mismos, según el producto. En la preparación hay que diferenciar las instalaciones para los alimentos de consumo en crudo y de consumo cocinado. Dentro de los alimentos de consumo cocinado existen a su vez los de consumo inmediato, los de mantenimiento y los de conservación. Tanto unos como otros pueden ser emplatados según el menú, teniendo siempre en cuenta los alimentos destinados a los alérgicos.
Todo esto ha sido explicado a los alumnos viendo las máquinas que se utilizan en el proceso y la labor que supone servir comida a tanta gente en un tiempo determinado.
A los alumnos les ha gustado la iniciativa y durante la segunda semana de noviembre han pasado ya por las cocinas todos los alumnos de 1º y 2º ESO.
Sin duda, esto puede ayudar a entender el valor de preparación que conlleva esos alimentos que no gustan tanto, pero que sin embargo son fundamentales para tener una dieta equilibrada y buena salud.