En la retina de todos van a quedar las imágenes que se vieron y los momento emotivos que se vivieron el pasado 3 de junio en la procesión del Corpus que se recorrió las calles del colegio. El trabajo de todo un mes valió la pena con creces. Fue como el broche de oro a un curso en el que muchos se han esmerado en secundar las orientaciones del papa Francisco cuando convocó el Año de la Misericordia. VER VIDEO

La procesión, que se desarrolló entre las 15.15 y las 16.15, estuvo coordinada por la capellanía del colegio. Durante la mañana del viernes decenas de alumnos colaboraron en el despliegue de 200 metros de alfombra elaborada a base de papel destraza o moqueta roja, dependiendo de la zona, sobre la que se volcaron 5 toneladas de serrín coloreado.

Las alfombras tenían diversos motivos icónicos, algunos artísticos y otros con escudos del colegio, que un grupo de alumnos de ESO habían preparado con piezas de cartón pluma recortadas. El serrín, coloreado con tintas textiles, dio una apariencia espectacular como se puede ver en las fotografías y video.

Los tres altares en los que se paró la procesión para rezar y adorar al Santísimo fueron adornados por un grupo de veinte madres del colegio. Sesenta metros cuadrados de telas y algunos motivos cubrían las mesas que hicieron de altar. Los altares y parte del recorrido estaban adornados con más de dos mil quinientas flores. La parroquia de san Alberto Magno dejó el palio y la cruz y velas procesionales.

Juan José López Abascal, capellán de Tajamar y quien presidió la procesión, agradeció “a todos su colaboración y la manifestación de fe que demostraron. Va a ser difícil olvidar este acto. Creo que Dios estará contento de ver tanta generosidad”.

Esta procesión del Corpus se enmarca en el Año de la misericordia, que el que el papa Francisco convocó el 20 de noviembre de 2015. Entonces dio algunas orientaciones a los católicos sobre el modo de vivirlo. Principalmente fueron la realización de obras de misericordia (materiales y espirituales) y acercarnos al amor de Dios, manifestado en el sacramento de le reconciliación y en la Eucaristía.

Eso ha sido lo que hemos intentado hacer en Tajamar. A lo largo de estos meses muchos alumnos y familias han participado en campañas de recogidas de alimentos, han multiplicado las visitas a residencias de ancianos o personas necesitadas. Además, cada viernes hubo velas de oración al Santísimo y una especial de 24 h en el mes de marzo.